Veloz como un bolido!

Lamió las manos de caos sin decir nada, aquel sabor de hierro le parecía singular y le encantaba la chica después de haber visto tantas violaciones había obtenido cierto placer con la agresividad estando en la intimidad. Su problema psicológico se había vuelto también uno de sus placeres más grandes, al menos estaba teniendo diversión en aquel lugar. – Haré tanta perversión como tú me hagas – Confesó, a ella le encantaba también que se fuera de lo usual con quien lo hiciera.

Era romántica sí, pero no con un desconocido, coopero con él para que le quitara la ropa con más rápides y ambos pudieran estar a la par y desnudos, si los vieran eso sería algo interesante, intentar entre los dos seducir al vigilante para que compartiera el placer con ellos, aunque ella nunca había hecho aquello con más de una persona y no le llamaba la atención pero nunca estaba demás probar.

Ella abrió las piernas por completo dejando que este hiciera lo que hiciera con su parte intima. Lo jaló agresivamente con la mano entrelazando sus dedos en su cabello y obligándolo a que lo hiciera con más profundidad, ella gimió complacida, no le gustaban las reglas en este tipo de situaciones. – El directos, sería bueno ver que hace con nosotros, si nos interrumpen seré capaz de buscar la manera a que lo hagas de nuevo y termines el trabajo – Mordió su labio inferior con fuerza, aunque los gemidos y gritos fuertes le gustaba, le parecía divertido llamar la atención, ser exhibicionista era parte de esto.

“!Oh Nadine, en que te has metido esta noche, que rica noche!” la chica se repetía para si misma, a pesar que esto le agradaba y había deseado siempre, nunca lo había experimentado de manera tan brutal, podía sentir el ardor de su espalda con aquella cortada de Caos le había hecho, la chica se aferraba de aquel automóvil con fuerza, con toda la poca fuerza que su cuerpo aún tenía, los orgasmos hacían que ella se sintiera cada vez más cansada sumándole la fuerza que le aplicaba el chico a sus embestidas.

Se empujó haciendo que Bob diera varios pasos hacia atrás, la chica se arrodillo en el suelo y separó sus piernas invitándolo a que entrara de nuevo en aquella posición, dejo caer su pecho en el piso frió y se empino por completo dándole una vista perfecta de ella, de su cuerpo, podía notarse su sangre escurrir, la humedad de su parte intima escurrir de aquellos orgasmos que ya había tenido. – Toma de mí todo Caos tómalo – El chico le hablaba de pureza, y ella quería darle lo que él quería de ella.

Movió de un lado a otro sus glúteos insitandolo y cuando sintió de nuevo tenerlo dentro gimió fuerte, sintiendo su cuerpo temblar de sobre manera, sintiendo espasmos fuertes en su vientre, la chica estaba por terminar, sentía qué el clímax la invadía, movió sus caderas en círculos al ritmo que él entraba y salía de ella. Sintió su cuerpo temblar como aviso, su mirada de nubló y sintió un mareo. – TODA TUYA CAOS! – Grito al tiempo que soltó un quejido, le ardía su parte intima, sentía que se la habían desgarrado, bajo su mano acariciándose ella misma, subió su mano y observo una gran mezcla de sangre y sus jugos, sumando los de Bob, la chica dejo caer su cuerpo contra él suelo.